viernes, 9 de octubre de 2009

Los dos amigos



Hoy os contaré una fábula de Isopo.
Iban dos amigos caminando, cuando, de repente, se les presentó un oso grande como una casa. Uno de ellos subió corriendo a un árbol, y se escondió entre el follaje; el otro, el cual no tuvo tiempo de huir, se tumbó en el suelo haciendo ver que estaba muerto.


El oso se acercó a olerlo por todos lados, la boca y  las orejas. Pero el hombre, aguantando la respiración tanto como podía, hizo creer a la bestia que ya no era más que un cadáver.

El animal, creyéndole sin vida, se alejó hacia el bosque.

El que se había escondido en el árbol bajó y preguntó a su compañero qué le había dicho la fiera, que tanto se había acercado a su oreja.

- Me ha dado un buen consejo -le respondió el otro-. Me ha dicho que a partir de ahora, nunca más vaya con amigos que te abandonan al más leve peligro.

Moraleja de la fábula:

Los buenos amigos se conocen cuando se necesitan.


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* Aplasia Medular Congénita



* Fundación Carreras. Contra la leucemia.



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1 comentario:

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