Por qué si sé cuál es mi camino, no lo sigo?

 

Si sé lo que tengo que hacer? Por qué no lo hago?

 

Por qué lo ignoro? por qué me encargo de sabotearlo con excusas, para no conseguir hacer realidad mi sueño?

 

Nick Hall, responde que nosotros mismos nos encargamos de ponernos "trampas mentales" con nuestros propios pensamientos y creencias. Precisamente, a nuestro cerebro le gusta lo conocido, permanecer en tierra conocida. Por lo tanto, cuando queremos arriesgar en un cambio, también arriesgamos a fracasar. Nuestro cerebro se percata, y crea patrones coherentes con esto.

 

No hay discusión posible, lo que impide que alcancemos nuestro sueño, es precisamente el: MIEDO AL FRACASO!

 

Las buenas noticias:

Podemos hacer cualquier cosa que nos propongamos, si lo deseamos con vehemencia. Dedicándole tiempo y esfuerzo, conseguiremos todo lo que queramos, si es un objetivo digno.

 

No hay más:

 

TIEMPO, ESFUERZO y DESEO son los ingredientes básicos para conseguir nuestro sueño.